Se desarrolla en el peaje de General Lagos de la autopista Rosario-Buenos Aires, y en el control de la localidad de Florencia, límite con Chaco. El programa está a cargo del Ministerio de Salud de la provincia y de la Agencia Provincial de Seguridad Vial.

El gobierno de Santa Fe, a través del Ministerio de Salud y de la Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV), puso en marcha el plan Accesos Cuidados en dos de los puntos de la provincia con mayor circulación desde otros territorios: el peaje General Lagos de la autopista Rosario-Buenos Aires y la ruta nacional 11 a la altura de la localidad de Florencia, en el límite con Chaco. De esta manera, se transformó en la primera jurisdicción en implementar dicha iniciativa, en el marco de la pandemia de Covid-19.

«El objetivo es controlar lo que sucede con aquellos que circulan en territorios limítrofes con Santa Fe, para mantener el estatus que tiene la provincia: sin circulación comunitaria del virus», explicó Osvaldo Aymo, director de la APSV, en diálogo con Radio Black 92.5.

Según detalló Aymo, la planificación inicial abarca 20 días con implementación de lunes a viernes, cuatro horas por la mañana y otras cuatro por la tarde. «Buscamos cubrir el plazo donde podría llegar a producirse el pico de contagios en Buenos Aires».

Consiste en detener la marcha de algunos usuarios para completar una planilla con la geolocalización del conductor. En caso de que el destino sea dentro del territorio provincial, se le tomará la temperatura, se le realizará una serie de preguntas frecuentes y el test de olfato. Si la persona está en parámetros normales, sigue su viaje; en caso de encontrar algún síntoma, se activa el protocolo y se realiza un hisopado PCR.

El funcionario confirmó además que se hará el hisopado a aquellos que vengan de lugares donde existe una circulación alta del virus, como Ciudad Autónoma, Conurbano Bonaerense y la localidad de Resistencia.

Por último, anticipó que no se descarta la posibilidad de incluir el test rápido de sangre para las próximas semanas. «Tratamos de tapar la ventana enorme que son los asintomáticos, quienes pueden aumentar la cantidad de contagios», concluyó.