San Lorenzo y Puerto General San Martín confirmaron que no implementarán un impuesto sobre los combustibles, en contraste con la reciente decisión de Rosario y otras localidades de aplicar una tasa que incrementa en un 1,6% el costo por litro de combustible.

Ambas ciudades vecinas dejaron claro que no están considerando seguir el ejemplo de Rosario, Funes y Capitán Bermúdez, que ya adoptaron la medida impositiva. Autoridades locales de San Lorenzo y Puerto General San Martín afirmaron que no tienen planes de imponer un recargo del 1,6% al precio de cada litro de nafta en las estaciones de servicio de sus jurisdicciones.

En declaraciones recientes, representantes de ambas ciudades desestimaron cualquier especulación al respecto, afirmando que ni siquiera han analizado la posibilidad de implementar dicho impuesto, y calificaron como «una mentira» cualquier afirmación en sentido contrario.

En otro contexto, diversas entidades empresariales presentaron una solicitud formal a la Municipalidad de Rosario para revocar la denominada «Tasa Vial». Firmantes destacados incluyen la Asociación de Transporte de Cargas de Rosario (ATCR), la Sociedad Rural de Rosario (SRR), el Movimiento Nacional Pyme (MONAPy), Fundación Apertura, la Cámara Federal de Transporte Turístico, Conectando Empresas y la Asociación Empresaria de Funes.

Los asesores legales de estas entidades argumentan que la tasa, equivalente al 1,6% del precio del litro de combustible, es inconstitucional y viola leyes nacionales, provinciales y municipales. Señalan que la tasa podría infringir la ley provincial 10197, prohibiendo a municipios y comunas crear gravámenes locales en conflicto con el régimen federal, lo que podría resultar en la pérdida de la coparticipación de impuestos nacionales.

Además, sostienen que la tasa va en contra de la legislación 505/58, del Estatuto Orgánico de Vialidad Nacional, que prohíbe la creación de gravámenes locales sobre los combustibles líquidos. Los empresarios del transporte advierten que esta medida aumentará los costos, afectando directamente a los consumidores, mientras que las cámaras de estaciones de servicio argumentan que el impuesto incrementa los costos administrativos y financieros.

A pesar de que la Tasa Vial aún no se ha implementado en Rosario, ya que el gobierno está definiendo los mecanismos de retención con las estaciones de servicio, se espera que se aplique durante el primer trimestre. Mientras tanto, municipios vecinos como Funes y Capitán Bermúdez han aprobado sus propias tasas viales, generando incertidumbre sobre las acciones futuras en la región.