No hubo audiencia en Tribunales de San Lorenzo, pero sí un acuerdo entre la defensa del imputado y la Fiscalía. El ex jefe de Orden Público estuvo 110 días encerrado.

Al comisario Sergio Di Franco, ex jefe de Cuerpos de la Unidad Regional XVII acusado de pegarle un tiro en la cabeza a Juan Cruz Vitali el pasado 12 de mayo en Capitán Bermúdez, le concedieron el beneficio de la prisión domiciliaria durante 90 días, mientras se realizan las pericias solicitadas por Fiscalía de San Lorenzo y la defensa encabezada por el penalista rosarino Paul Krupnik, a la espera de los correspondientes resultados.

Finalmente, este miércoles no se celebró la audiencia de prórroga que estaba fijada para las 14 h en los Tribunales de San Lorenzo. «En el día de la fecha el comisario Di Franco obtuvo el arresto domiciliario por evidencia que apuntala lo accidental del lamentable suceso. No se celebra audiencia, ya que se materializa por acuerdo con el MPA. Claro ejemplo del respeto por el deber de objetividad por parte del fiscal (Miguel) Moreno, que más allá de su rol acusador valoró la clara evidencia desincriminante contra Di Franco», publicó Krupnik en su cuenta de Twitter.

En tanto, desde el Ministerio Público de la Acusación informaron que «se llegó a un acuerdo de partes entre defensa y Fiscalía para la morigeración de la prisión preventiva efectiva a prisión domiciliaria por el término de 90 días, tiempo en el que estarán en proceso pericias solicitadas por ambas partes a la espera de resultados».

«Al estar de acuerdo las partes, con conocimiento de la familia del fallecido -ampliaron desde el MPA-, se presentó la solicitud por escrito ante la Oficina de Gestión Judicial de los Tribunales de San Lorenzo para suspender la audiencia prevista en donde se iba a tratar el mismo».

Di Franco permaneció encerrado durante 110 días. En la audiencia anterior, celebrada en el mes de julio, a la defensa le habían negado la morigeración de la prisión domiciliaria, dictando el juez Carlos Pareto la extensión de la prisión efectiva por 50 días, peticionada por el fiscal Miguel Moreno.

Di Franco permanece acusado del homicidio agravado por abuso de autoridad y uso de arma de fuego de Juan Cruz Vitali, acribillado de un tiro en la cabeza luego de una persecución policial por evitar un control de tránsito en Avenida San Lorenzo y Chacabuco.

Aquel domingo 12 de mayo, Vitali detuvo la marcha del Volkswagen Fox que conducía en Montevideo al 400, frente a la casa de su abuelo, y fue víctima de un disparo con orificio de entrada y salida en el cráneo. En la vivienda y en el vehículo también se hallaron al menos otros seis tiros.

Ariel Devico es el otro jefe policial imputado por la muerte de Vitali. En dicho caso, el juez Juan José Tutau no aceptó la figura legal de abuso de arma, propuesta por la fiscal Melisa Serena, y la modificó por agresión. Posteriormente dictó la libertad del ex jefe de Orden Público de la Unidad Regional XVII, con la única regla de conducta de fijar domicilio.

Ayer, Jorgelina y Florencia, madre y novia de Juan Cruz respectivamente, habían participado de la marcha que se celebró en Rosario en contra del gatillo fácil.