Lúcida y vital, celebró su centenario con una fiesta en Ibarlucea. Nació bajo el nombre de Clotilde Teresa Bertotto y en su cumpleaños lució una desopilante remera que reivindica su longevidad. 

Nació bajo el nombre de Clotilde Teresa Bertotto, el 5 de noviembre de 1923, en una casona de Sucre y Mendoza, en Rosario. Vivió en Capitán Bermúdez desde los 23 años, cuando contrajo matrimonio con un trabajador de Celulosa Argentina. La historia de Doña Tola escribió un capítulo inolvidable cuando el domingo pasado cumplió 100 años de vida.

«Esta re bien, lúcida y vital. Ella adora las plantas y quería festejar su cumpleaños», contó Beatriz Capriotti, la hija de Doña Tola. La celebración se realizó el domingo por la tarde en una casa familiar de Ibarlucea. Allí estuvieron sus seres queridos y hasta la médica que la atiende, con quien forjó un estrecho vínculo.

En sus años de juventud, Tola se desempeñó como secretaria ejecutiva de una escuela secundaria, hasta que se casó con Hugo Capriotti, un gringo que trabajaba en Celulosa Argentina. Tuvieron una hija, dos nietos llamados Daniela y Hernán, y cuatro bisnietos: Iván, Manuel, Ignacio y Matías. Su familia también está integrada por Sergio, su nieto político.

 

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El domingo, Tola disfrutó de una tarde de celebración por su centenario de vida. Le confeccionaron una desopilante remera con un podio en el que ella aparece en el primer lugar, seguida por Mirtha Legrand y la reina Isabel II del Reino Unido. Doña Tola les ganó en longevidad.