Las empresas argentinas sostienen  que la medida responde a intereses comerciales españoles y no a cuestiones sanitarias. Tanto los privados como el Gobierno coincidieron en los escasos avales de laboratorios presentados por los europeos.

La Unión Europea (UE) ratificó que desde el pasado domingo se encuentra prohibido el ingreso de limones y naranjas al Viejo Continente y según estimaron desde las cámaras que nuclean a este sector, el perjuicio económico para esta actividad a nivel nacional será de 40 millones de dólares.

Mientras que los empresarios argentinos señalaron que el principal mercado externo de cítricos argentinos quedará cerrado hasta mayo de 2021, la autoridad sanitaria nacional advirtió sobre la falta de aval de laboratorio en las notificaciones europeas y que también se solicitó a la UE que tenga en cuenta las diferencias agroecológicas entre NOA y NEA. De acuerdo a estadísticas oficiales, el mercado europeo representa el 50% de las exportaciones de cítrícos del país.

Tal como adelantó BAE Negocios, a finales de la semana pasada trascendió que España frenó el ingreso de naranjas argentinas, tras detectarse casos de mancha negra. La Federación Argentina del Citrus (Federcitrus) reconoció que esta medida representa que “un 50% del volumen exportable de naranjas argentinas que no podrán ingresar al mercado europeo”.

De acuerdo a estadísticas públicas y privadas, en 2019 se exportaron a ese destino unas 130.000 toneladas de limones y 30.000 de naranjas. En este último cítrico, desde el Gobierno se esperaban que el año cierre en 40.000 toneladas. “Con lo que está en viaje y lo que queda por certificar, se terminarán exportando 20.000 toneladas”, señaló una fuente del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).

Para Federcitrus, esta medida es «de enorme perjuicio para la actividad, para la economía de las regiones involucradas en la producción de cítricos y para miles de personas que dependen de ella», según informaron a través de un comunicado. También remarcaron que más allá de la cuestión sanitaria, la decisión europea de paralizar el ingreso de naranjas representa “una barrera eficaz para frenar las exportaciones de limones y naranjas argentinos, con el consiguiente beneficio para su producción doméstica”. El presidente de la entidad, José Carbonell, adelantó que iniciaran negociaciones con el Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales de Inglaterra (Defra, por sus siglas en inglés) para gestionar el ingreso de naranjas en ese país.

Consultado por este medio, el director nacional de Protección Vegetal del Senasa, Diego Quiroga, remarcó que las notificaciones con aval de laboratorio, tal como solicitan las normas internacionales, no llegan al 10%. “Nos resulta muy llamativo y preocupante, porque para mancha negra, y para que no se confunda con otro tipo de problema, se debe hacer este análisis de laboratorio que confirme o no la presencia de la enfermedad”, destacó el funcionario.

Fuente: BAE Negocios