La intervención policial fue en una casa de Franciscanos al 2700. El muchacho fuera de sí golpeó a la madre, se atrincheró y quiso ahorcarse.
Dos policías le realizaron maniobras de RCP y le salvaron la vida a un adicto a las drogas de 21 años que se encerró en su habitación e intentó suicidarse, en un hecho ocurrido ayer en Franciscanos al 2700, de San Lorenzo.
Cuando llegó un patrullero del Comando Radioeléctrico al lugar, una mujer manifestó que su hijo de 21 años habría estado bajo efectos de drogas, la agredió físicamente y se encerró en la casa.
La madre aseguró que temía por la vida de su hijo, ya que se encontraba fuera de sí y advirtió que atentaría contra su propia vida porque tenía un cuchillo de cocina.
Tras una breve charla de los agentes con el muchacho, este respondió que no iba a salir de la casa y que tampoco dejaría ingresar a nadie. El fiscal en turno ordenó el ingreso a la fuerza y el resguardo del agresor.
Entonces se cortó el diálogo con el joven, por lo que con presencia del personal policial de irrupción entraron a la casa y lo hallaron en una de las habitaciones, recostado sobre una cama con la cabeza suspendida de una frazada que estaba anudada alrededor del cuello, precisaron desde la Unidad Regional XVII.
El joven adicto no tenía signos vitales, por lo que inmediatamente el jefe del Comando Central, el subcomisario Diego Cardillo, lo desató, lo recostó en la cama y con asistencia del subinspector Néstor Moreyra le realizaron maniobras de RCP, compresiones y respiraciones.
El muchacho respondió favorablemente hasta el arribo de la ambulancia del Sies. Una vez estabilizado, se lo trasladó al hospital Granaderos a Caballo, donde quedó internado, estable y sin riesgo de vida.
El fuerte viento provocó la voladura del techo del club Combate de San Lorenzo
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