Imputaron nuevamente al líder narco y a otro integrante de la banda, que manejaba un Ford Focus la noche que atacaron a balazos a Rodrigo en la puerta de su casa en barrio Norte.

Nueva imputación para Brandon Bay en Tribunales de San Lorenzo. Al líder de la banda narcocriminal Los Gorditos le atribuyeron este miércoles el crimen de Rodrigo Gigena, el sanlorencino de 26 años atacado a balazos cuando salía de su casa la noche del 6 de agosto de 2019 en barrio Norte.

A Brandon Bay, quien actualmente cumple condena en la cárcel de Coronda y ya acumula tres imputaciones por múltiples delitos cometidos en zona norte de San Lorenzo, los fiscales Matías Edery y Aquiles Balbis lo acusaron de haber sido el instigador del crimen de Rodrigo Gigena.

Brandon no fue el único imputado. A Juan Manuel «Pera» Álvarez lo acusaron de tener un rol activo en el crimen de Rodrigo, perpetrado en la cuadra de Clemente Albelo al 3600.

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Según la investigación, aquella noche el apodado Pera manejaba el Ford Focus de color gris desde donde salieron los disparos que le ocasionaron la muerte a Gigena, cuando salía de su casa a comprar una gaseosa al kiosco que sus padres tienen enfrente.

En la cárcel de Coronda, Bay enfrenta una condena de 10 años por delitos relacionados con las disputas territoriales por narcomenudeo en zona sur de Rosario. En el último año lo acusaron de los crímenes de Gerardo “Pecho” Pérez en San Lorenzo y Brian “Runi” Sánchez, perpetrados en mayo pasado en barrio Norte.

En la audiencia virtual de este miércoles, a Brandon Bay le atribuyeron haber dado la orden desde la cárcel de Coronda de consumar el ataque que le costó la vida a Rodrigo Gigena, cuando en realidad el objetivo era eliminar a un “transero” que vivía a 30 metros, quien se dedicaba a la venta de estupefacientes para la organización del apodado Willy, precisaron los fiscales en la acusación.

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La declaración de Yasmín Espín, integrante de la banda de Brandon que también permanece en prisión, resultó decisiva para que los fiscales pudiesen desentrañar el trasfondo que redundó en el asesinato de Rodrigo. Ella conocía a la víctima: era compañera de baile en clases de cumbia cruzada, señalaron los pesquisas.

Aquella noche del ataque, Yasmín iba como acompañante en el Ford Focus que manejaba Pera Álvarez, cuyo tercer ocupante era un tal «Pochi», a quien los fiscales sindican como el sicario que descargó una ráfaga de balas en la cuadra de Albelo al 3600. La chica se encargaba de cuidar una casa en la calle Del Bajo que la organización de Brandon utilizaba para guardar armas y funcionaba de aguantadero.

Brandon Bay ordenó el ataque en el que mataron a Rodrigo Gigena