El gobernador había mantenido una serie de encuentros en Buenos Aires, con el propósito de evitar que el gobierno persistiera con el aumento de retenciones a los subproductos de la soja y a sectores industriales. Sin embargo, el dictamen votado anoche no registra modificaciones en los puntos relativos a los derechos de exportación. «Es no entender lo que sucede lejos de Buenos Aires», dijo el jefe de la Casa Gris.

El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, llevó a cabo una serie de encuentros en la ciudad de Buenos Aires el martes, con el objetivo de evitar que el Gobierno persistiera con el aumento de retenciones a los subproductos de la soja y a sectores industriales. A pesar de obtener el respaldo de algunos diputados que expresaron su desacuerdo con este punto, el dictamen mayoritario de la Ley Ómnibus liderada por La Libertad Avanza (LLA) no revirtió la decisión de incrementar dichas cargas.

Este miércoles por la mañana, Pullaro expresó haber regresado a su provincia con un sentimiento agridulce y criticó a la Casa Rosada. Señaló que el aumento de impuestos a los sectores productivos no será rechazado por los diputados en el recinto, sino por la falta de comprensión por parte del gobierno mileísta.

En una entrevista con Cadena 3, el mandatario santafesino declaró: «Esperábamos que el Gobierno pudiera escucharnos desde el interior productivo. Imponer retenciones al campo y a la industria, que exportan valor agregado, es no entender lo que sucede lejos de Buenos Aires».

Pullaro también afirmó que en varias ocasiones dialogó con funcionarios nacionales que demostraron comprensión de la situación, pero justificaron las retenciones como una necesidad para equilibrar las finanzas nacionales, especialmente después «del estado de las cuentas que dejó el kirchnerismo después de 20 años de despilfarro». No obstante, lamentó la falta de cooperación por parte de los libertarios.

«Dialogamos con [Rodrigo] de Loredo, quien nos aseguró que no respaldaría las retenciones; con [Miguel] Pichetto, con el bloque de Pro, y nos fuimos con un sabor agridulce. Dulce porque defendimos la producción del interior y no habrá retenciones, pero amargo porque será el Congreso y no el Poder Ejecutivo quien corrija esto», expresó después de reunirse con representantes de los bloques aliados que rechazaron el aumento de las alícuotas, pero no lograron que el Gobierno retrocediera en este punto para excluirlo del dictamen que obtuvo más apoyo y se discutirá primero.

En cuanto al futuro del trámite cuando los diputados retomen el debate en el recinto el jueves, Pullaro adelantó que algunos espacios que colaboran con la Casa Rosada planean respaldar el proyecto en general, pero votar en contra del capítulo de retenciones en particular. «Con ello, estarán protegidos, no habrá retenciones, pero se proporcionarán las herramientas que el Presidente está solicitando para sacar a Argentina de esta situación», explicó.

Pullaro también compartió que tuvo un breve encuentro con Javier Milei y que los ministros lo reciben de manera cortés, a pesar de obtener pocas respuestas. «Es un gobierno con la intención de escuchar y hacer las cosas correctamente, pero está muy limitado por la situación financiera», concluyó.