Tras realizar fuertes críticas a Aricó y a su referente provincial, Omar Perotti, el espacio Soberanía Popular se corre de la escena para fortalecer el proyecto electoral del peronismo. El engaño electoral y la promesa de cargos.

A través de un posteo en el que aparecen Aricó junto a los principales referentes de Soberanía Popular (SP), el espacio de izquierda anunció que baja a su candidato a intendente Mario Besedniak para apoyar al delfín de Perotti en la ciudad. En principio, la noticia causó sorpresa y el optimismo inicial que acompañó a sus protagonistas empezó a diluirse con el correr de las horas al ver las repercusiones en redes sociales y en diferentes círculos de opinión.

Se sabe: en política dos más dos no siempre dan cuatro, sobre todo cuando los factores que se suman son de naturaleza tan distinta y la operación es percibida por la sociedad como un simple arreglo de carácter electoralista.

Por una parte, muchos se preguntan qué pensará el votante moderado de Aricó de esta alianza con un sector que plantea ideas extremas acerca del derecho a la propiedad privada y propone incluso erradicar de la zona empresas y puertos que son el sustento de miles de familias.

Por la otra, los votantes de SP tienen derecho a sentirse engañados, ya que la fuerza de izquierda históricamente ha abjurado de los partidos tradicionales y, con un timing curioso, sus dirigentes locales deciden sumarse al peronismo luego del rotundo fracaso del gobierno de Perotti.

De hecho, en una entrevista que brindó al medio 11 Noticias en la campaña electoral de 2021, el periodista Germán Mangione, referente de Soberanía Popular, expresaba: “Acá estamos hablando de un proyecto político del oficialismo, que es el del radicalismo – Cambiemos, que tendrá sus idas y vueltas pero es un radicalismo que más allá de ser llevado adelante por el frente progresista tiene más coincidencias políticas con la fuerza de Mauricio Macri, y por otro lado, la otra fuerza con posibilidades es la de Esteban Aricó, que viene trabajando en la gestión de Leonardo Raimundo y que se encolumna detrás de Omar Perotti. Cuando vos ves las ideas tanto del macrismo, radicalismo y perottismo, tampoco hay tantas diferencias en lo macro, que es lo que hay que discutir”.

Y hasta acusó al propio Arico de mentirle a la gente por hablar de un acuerdo entre ambos espacios. “Nos decían que a nosotros nos banca la municipalidad y después hemos escuchado al revés. Con todo respeto y posibilidad de consenso, pero sin confundir a la gente, escuchamos a Esteban Aricó decir que estaba trabajando en algunos acuerdos políticos con nosotros, que la verdad que nada de eso es real. Tiene que ver con esta idea de que lo nuestro no aparezca y no crezca, decir que si nos votás o no es lo mismo, entonces cuando las opciones se reducen, con algunas diferencias, más allá de dos candidatos que pueden ser diferentes y que yo tengo buena relación con ellos, estoy hablando de proyectos políticos”, sostuvo Mangione en aquella oportunidad.

En otra nota remarcó que “no hay grandes diferencias entre lo que plantean el raimundismo, el traferrismo y el perotismo para San Lorenzo”. Si no había grandes diferencias, ¿cómo explicar el acuerdo anunciado ahora? ¿Cómo decirles a sus votantes que bajaron una candidatura propia para apoyar al frente que tiene como candidatos a Omar Perotti o al senador Armando Traferri, a los que tanto criticaron?

La explicación más sencilla apunta a los cargos que Aricó habría prometido a Soberanía Popular en caso de acceder al Ejecutivo municipal. En definitiva, una burla a la voluntad popular que subestima la inteligencia del electorado y desnuda la irresponsabilidad política de la ambición de poder como fin en sí mismo.