La economía de consumo creció en algunos segmentos, aunque también comienza a sentirse el impacto del sector gastronómico. «Hay que buscar alianzas y acompañar al mercado», sostuvo Gustavo Carreras, sommelier de la bodega Catena Zapata. Además, analizó el futuro post pandemia y las relaciones con el mundo.

La pandemia de coronavirus golpeó a la economía del mundo y Argentina no fue la excepción. Sin embargo, algunos rubros, como la industria del vino, deben realizar análisis segmentados.

«Son meses de puro aprendizaje. Tratamos de buscar una alianza productiva entre el cliente, el consumidor y nosotros, para sostener la actividad en una etapa difícil», expresó Gustavo Carreras, sommelier de la bodega Catena Zapata, en diálogo con Radio Black 92.5.

Destacó los beneficios de la incursión digital que tuvo el rubro y la catalogó como positiva: «Hemos hecho muchas capacitaciones productivas para la gente que está ligada al servicio. Hemos dado un avance en ese sentido y sorprende mucho».

En cuanto al impacto en los volúmenes de ventas, resaltó que hubo una mejoría en el segmento de vinotecas, incluso por encima del rubro supermercados. Sin embargo, la contracara se evidencia en el sector de la gastronomía, fuertemente golpeado por la crisis sanitaria y las restricciones para su funcionamiento.

«Analizamos a cada cliente y cómo podemos entrar en un vínculo correctivo que sirva para construir en un futuro y que no sea un resultado duro como el de bajar la persiana. Todas las bodegas están con una idea lineal similar: buscan colaboración para que el consumo se mantenga», agregó.

Desde Buenos Aires, lugar que regresó a la fase 1 de la cuarentena esta semana, insistió en el concepto de rescate para el sector en el interior. «Son quienes nos tienen que ayudar a nosotros; estamos completamente cercados. Depende de las conductas personales, que son particulares».

El mañana es incierto. «Habrá que hacer un trabajo regenerativo, con el que vamos a tener que ir acompañando lo que suceda en el mercado. Es muy inseguro opinar sobre el futuro, porque no sabés hacia donde vamos. Lo único cierto es que necesitamos fortalecer los vínculos y que todos construyamos un mantenimiento del consumo».

Sobre las proyecciones del vino en el mundo, mencionó que a partir del mes de octubre podría comenzar un «trazo de intercambio» en el comercio internacional, «pero dependerá mucho de lo que ocurra», concluyó Carreras.