Laura contó que el tatuador sanlorencino «pasó la noche bien, no hizo fiebre ni arritmias» tras la operación en la que le colocaron un triple by pass.

«Pasó la noche bien, tranquilo, dormido, estable. Le van bajando las drogas de a poquito. El balón ahora no late constantemente, sino que hace un latido sí y uno él. Para ir destetándolo de a poco. No hizo fiebre ni arritmias. Y eso es muy bueno, me dijeron los médicos». De esta forma, Laura Iztegui contó detalles de las primeras horas del postoperatorio de su esposo Franco Scarpino, el tatuador sanlorencino que ayer se sometió a una cirugía cardiovascular en la que le colocaron un triple by pass, tras haber sufrido una descompensación cardíaca mientras participaba de un partido de fútbol junto a músicos de la banda británica Iron Maiden y ex futbolistas.

Laura acompaña a Franco en la Clínica Zabala del barrio porteño de Belgrano desde que se infartó el pasado viernes 11 durante un partido de fútbol en cancha de Excursionistas, previo al recital que Iron Maiden ofreció al día siguiente en el estadio de Vélez Sarsfield. «No me alcanzan las palabras para agradecerles a todos ustedes. Me conmueve la solidaridad, el apoyo y cariño que nos están brindando. Cada uno desde su lugar, desde donde pueden, hicieron tanto. Conocidos y desconocidos también, realmente muy conmovida y agradecida, eternamente agradecida», escribió Laura en redes sociales tras la intervención quirúrgica del miércoles.

«La cirugía fue un éxito. Ahora debemos darle tiempo de recuperación. Según los médicos, estas 24-48 horas son las más importantes. Sé que con toda la energía que le están mandando y la fuerza que tiene Franco, va a estar bien pronto», publicó Laura en su cuenta de Facebook.