La falta de compromiso y la ya clásica ambigüedad del concejal Aricó para apoyar al candidato de su partido, abrió una nueva grieta en la corroída estructura del PJ en la región. El kirchnerista Martín Cerdera y el intendente puertense De Grandis fueron los que brindaron mayor estructura al ministro de Economía.

En una jornada electoral que quedará marcada en la historia política de San Lorenzo y la región, el peronismo sufrió una aplastante derrota en las urnas, revelando grietas y divisiones internas que comprometen aún más su futuro en el ámbito local. La contienda tuvo como epicentro la candidatura de Sergio Massa, respaldada por la coalición Unión por la Patria, quien se vio eclipsado por el sorpresivo ascenso del libertario Javier Milei, ahora presidente electo de Argentina.

Martín Cerdera, referente del Movimiento Evita, y Carlos De Grandis, intendente de Puerto San Martín, fueron los únicos en brindar un respaldo explícito a Massa en el plano regional, desafiando la corriente que se inclinó hacia Milei. Este último, con un discurso rupturista y propuestas basadas en la libertad individual y el liberalismo económico, logró captar la atención y el apoyo de un electorado que buscaba un cambio radical.

Sin embargo, la verdadera sorpresa se encuentra en la ambigüedad de otros referentes peronistas, entre ellos, el delfín del gobernador Perotti, Esteban Aricó, actual concejal kirchnerista y derrotado candidato a intendente. Este último, lejos de ofrecer un respaldo sólido a Massa, deambuló en la indefinición, revelando su ya clásica ambigüedad y falta de liderazgo que contribuyó a la derrota del peronismo en la región.

El escenario político local se ve ahora sacudido por el interrogante sobre el futuro del Partido Justicialista en San Lorenzo y la región. Con candidatos que demostraron no dar la talla en estas elecciones, la derrota a nivel local, provincial y nacional deja al descubierto las debilidades internas del PJ. Solo las ya conocidas figuras del senador Armando Traferri y el intendente De Grandis emergen como líderes consolidados que podrían sostener la fuerza dentro del partido.

En este contexto, queda la incógnita sobre cómo se reconfigurará el mapa del PJ local tras esta derrota contundente. ¿Será capaz el peronismo de San Lorenzo de superar sus divisiones internas y reinventarse para responder a las demandas cambiantes de la sociedad? La respuesta a esta pregunta marcará el rumbo del peronismo del cordón industrial en los próximos años, mientras la política local se enfrenta a un escenario de reconfiguración y desafíos inéditos.