jueves , 28 marzo 2024

Un conflicto diplomático sacude las relaciones bilaterales entre Alemania y Uruguay

El país europeo decidió rechazar al capitán de navío de la Armada de Uruguay, Marcos Saralegui, como agregado naval. La decisión evidencia la forma en que el poder occidental se maneja respecto a los países periféricos.

Puede que para muchos el tema no merezca ser tratado y mucho menos analizado. Sin embargo, es bueno comentarlo porque evidencia la forma en que el poder occidental se maneja respecto a los países periféricos, en este caso Uruguay.

Alemania decidió rechazar al capitán de navío de la Armada de Uruguay, Marcos Saralegui, como agregado naval.

Se trata del ex presidente de la Comisión Técnica que asesoró la compra directa de buques del tipo OPV para la Armada de Uruguay, apoyando la opción china.

El tema no está cerrado en razón de que se presentaron impugnaciones de parte de otros proveedores. Esta decisión política de Alemania no ha sido acompañada de una aclaración exacta respecto a las razones del rechazo.

Vale recordar que el año pasado Saralegui convocó (mediante orden del Comandante en Jefe de la Arma de Uruguay), a toda la oficialidad naval en pleno al anfiteatro de la Escuela Naval para defender vehementemente su opción por buques chinos.

Lo llamativo de este rechazo es que a nivel diplomático cuando un país decide no aceptar la propuesta deja transcurrir el tiempo público, para que el trámite caduque.

En este caso no sucedió, porque Alemania deseó expresamente mostrar esa negativa; y al darla a publicidad. Reforzó así su principalísimo objetivo, que fue de demostrar un cierto ‘disgusto’ para con Saralegui, y con ello afectar directamente al Ministro de Defensa, Javier García.

Respecto al tema interno uruguayo, la relación entre el Ministro y el oficial no era la más buena.

Los analistas políticos han recordado que en los últimos meses, esta se trata de la segunda agregaduría cuya designación queda sin efecto. Antes fue suspendida la del ex candidato a la del Reino Unido y la OMI, cuya solicitud había recaído en el ex director de la Escuela Naval, el capitán de navío Pablo Quezada (sometido a Tribunal de Ética por temas de acoso sexual a una subalterna).

Estos hechos constituyen cuestionamientos directos (de liderazgo) para con el Comandante en Jefe de la Armada y del Ministro de Defensa. Pero lo que está en juego –más allá de la intención injerencista alemana en la vida política uruguaya-, es la forma de manejarse y ‘castigar’ a quien considera que le ha privado de hacer negocios estatales.

Fuente: PrensaMare

Qué opinas?

Le puede interesar...

Pablo Piccirilli es el nuevo subsecretario de Puertos y Vías Navegables de la Nación

El funcionario designado por Javier Milei y Luis Caputo acredita una importante trayectoria en la actividad privada.