En 2002 el delantero beltranense estuvo a punto de ir a Paraguay para sumarse a las inferiores de Libertad. Alejandra, su madre, consultó con su por entonces preparador físico en Combate de San Lorenzo, Germán Kruchowski, quien le recomendó que se probara en Central. El resto es historia.

En el año 2002, Marco Ruben tenía 16 años y era una de las joyas en las inferiores del Club Combate de San Lorenzo, en aquel entonces gerenciado por un grupo empresario con fuertes vínculos en el fútbol.

Al mismo tiempo que el delantero oriundo de Fray Luis Beltrán hacía sus primeras armas en la Primera División de la Liga Sanlorencina, con el objetivo de obtener mayor rodaje y roce, Gerardo Martino desembarcaba en el Club Libertad de Paraguay, de la mano del mismo grupo inversor.

Entonces comenzaron las negociaciones y estaba todo arreglado para que el juvenil delantero llegara a las divisiones formativas del club charrúa. Sin embargo, había alguien que tenía dudas con respecto al traspaso: Alejandra, la madre del goleador.

«Me llamó y me pidió mi opinión”, contó Germán Kruchowski, preparador físico de la institución barrial. “Fui en contra de los intereses del grupo que gerenciaba al club, pero le respondí con el corazón. Si Martino perdía algunos partidos, seguro lo echaban de Libertad. Marco iba a tener que volverse, con las complicaciones después para traer el pase», dijo y luego sentenció: «Si se enteraban, me iban a despedir y capaz que no laburaba nunca más». Por eso le pidió discreción absoluta a la madre de Ruben.

Kruchowski recuerda que le aconsejó a Alajandra. “¿Marco no es de Central? Mandalo a probarse ahí. El pibe es bueno, si tiene que llegar lo va a hacer en Paraguay, Chile o Argentina». Y así fue, con un Ruben que quedó, en principio para formar parte de la línea que juega en la Asociación Rosarina y previo al cierre de fichajes fue pasado a la línea de AFA.

«El resto fue todo suyo, hizo un carrerón», concluyó el preparador físico, en relación a la figura que hoy representa Marco Ruben con 101 goles en la máxima categoría del conjunto canalla, pero también con un extenso recorrido en el fútbol internacional, en clubes de España, Francia, México, Ucrania y Brasil.

Impactante video: «¡Aprendé a manejar, la concha de tu madre!»